La plagiocefalia postural

¿Qué es la plagiocefalia?

Recibo consultas sobre el aplanamiento de la cabeza de los bebés menores de 6 meses muy frecuentemente, y es que puede ser un motivo frecuente de preocupación de los padres.

"¿Va a tener siempre la cabeza plana?" "¿Impide eso el crecimiento de su cerebro?" "¿Puedo hacer algo para corregirlo?"

Lo primero que debemos saber es que, a no ser que se trate de una deformidad llamativa, se trata de un aplanamiento fisiológico o debido sólo a la postura. Es decir, los niños menores de 3-4 meses están prácticamente todo el tiempo tumbados y apoyando la cabeza sobre su cráneo, lo que hace fácil dicho aplanamiento del área posterior del cráneo. Este aplanamiento puede ser central o lateral, y es lo que los pediatras llamamos plagiocefalia postural.

En la consulta, los pediatras y enfermeros de pediatría valoramos siempre la forma del cráneo del niño y su tono, de forma que distinguimos los aplanamientos que son puramente posturales (la inmensa mayoría) de los más llamativos y que pueden deberse  al cierre precoz y patológico de las suturas.

La mayoría de estas plagiocefalias posturales serán leves y afectarán poco más que a ese área posterior (occipital) del cráneo; y en cuanto sentemos un poco más al niño en lugar de tenerle tanto tiempo tumbado (generalmente a partir de los 3-4 meses), se corregirá en poco tiempo.

Si la plagiocefalia afecta a otras estructuras como el desplazamiento de las orejas, la parte frontal del cráneo, etc (como se observa en la foto) se podrá derivar a un especialista que valore si nuestro bebé necesita un casco ortopédico para favorecer dicha corrección.

¿Y porqué hay que colocarle boca arriba?

Desde el primer día de vida y hasta los 5-6 meses aproximadamente (pues después él sólo se volteará sin problemas) la postura en la que se debe colocar al niño cuando duerme es boca arriba. La cabeza puede estar de lado, pero el tronco es aconsejable que permanezca boca arriba. 

Esto es importante pues evita el posible riesgo de asfixia y “síndrome de muerte súbita del lactante”. Desde que se realiza dicha recomendación, se ha visto que han disminuido considerablemente estos problemas, pero se ha observado el aumento del aplanamiento de la cabeza en los primeros meses.

Pero, ¿podemos hacer algo los padres para evitar la plagiocefalia?

Sí, los cambios posturales. Beneficiosos no sólo para evitar el aplanamiento de la cabeza sino también para estimular el tono del niño. Estas medidas están dirigidas a liberar el cráneo de presiones externas y evitar el exceso de apoyo en una misma zona.

• Cuando el niño está tumbado en los primeros meses, se debe intentar establecer una rutina de cambios de postura que evite una postura fija de la cabeza (bien sea ladeada hacia el mismo lado siempre o mirando al techo). Por ello, es conveniente rotar la cabeza alternativamente hacia un lado y el otro en cada sueño a lo largo del día, y cambiar la orientación del niño en la cuna cada noche. 


• A partir del primer mes, mientras esté vigilado, deberá colocársele, a ratos, boca abajo (sobre la barriguita) encima de los padres o sobre una superficie plana.

• A partir del tercer mes, se puede colocar al bebé boca abajo frente a un espejo o con juguetes sonoros y luminosos, que favorecerán  el mantenimiento de dicha posición. 


• A cualquier edad, se debe fomentar los juegos que eviten que el niño esté siempre boca arriba: ponerle boca abajo sobre la barriga de los papás, boca abajo o sentado sobre las rodillas de los padres, haciéndolo “volar” como Superman, etc.


• En las sillitas de paseo se deberá evitar que la cabeza permanezca lateralizada hacia el mismo lado durante mucho tiempo. 


• Los portabebés (mochilas o pañuelos de porteo) pueden ser muy buena opción: el bebé deberá colocarse preferentemente encarado al portador y con las rodillas ligeramente más elevadas que los glúteos, quedando sus piernas “en libro abierto” (postura idónea, además, para la prevención y tratamiento de la displasia de cadera).

• Los cojines de soporte del cráneo pueden ser de utilidad, aunque no se ha demostrado que tengan más efectividad que las medidas posturales. No todos los cojines comercializados son recomendables; los que están bien diseñados tienen una cavidad central que permite un mejor ajuste de la cabeza.

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¡Hasta el próximo post!

Irene